Esta popular marca de gaseosa nació el 31 de mayo de 1949 fruto de la asiociación de tres hermanos: Francisco, Víctor y Félix Duffo González, cuyo padre ya se había dedicado antes de la Guerra Civil al mundo de los refrescos. La primera producción apareció en el mercado un año más tarde, elaborada en la primera fábrica situada en la calle Cactus de Madrid.
Francisco Duffo Foix, el padre, tenía origen francés y era un agente de importación-exportación de productos especialmente ingleses. Como tal estuvo en Argentina y en París, antes de recalar en San Sebastián y finalmente en Barcelona. Entre otras, representaba la casa francesa de equipamientos para fábricas de bebidas carbónicas SMA, resultado de la fusión de los talleres Guèret-Frères, Durafort, Alb Piot y Mondollot. Tal vez por esta razón, decidió instalar él mismo una fábrica de bebidas carbónicas en 1923, Espumosos El Rayo, que ya conocemos pues fue una de las primeras en embotellar Coca-Cola en nuestro país en 1928. Además de la gaseosa El Rayo (que según su publicidad se vendía en Barcelona en más de mil establecimientos), fabricaba los refrescos Samsón, Ginger-Ale, etc. En 1929 solicitó el registro de la marca Orange Rayo, que le fue concedido en 1930.
Una vez pasada la Guerra Civil, fueron sus hijos los que se hicieron cargo del negocio, y parece ser que fue Félix, que era el que poseía una gran visión empresarial, el que tuvo la idea de hacer una gaseosa que pudiera ser vendida masivamente por todo el país. Le acompañaron en la aventura sus hermanos Francisco, poseedor de una buena experiencia comercial y Víctor, que había estudiado química y que creó y atendió la calidad del concentrado de la gaseosa. En la sociedad La Casera S.L., Félix poseía el 50% del capital, mientras que el resto estaba repartido a partes iguales por los otros dos hermanos. Los Duffo tuvieron una gran incidencia en el ramo de las bebidas, siendo marcas de la familia, además de las citadas, Jumate, Kiola y la popular en los años 50 Orange Iris, además de otras de menor relevancia.
Fuente: www.muchocuadro.com |
Para cumplir el objetivo de extenderse por todo el país, se llevaron a cabo diferentes estrategias. Por razones de transporte, optaron por establecer una fábrica en cada provincia española, pero lo llevaron a cabo por distintas vías. Así, constituyeron una sociedad anónima con los mismos propietarios de la marca para cada fábrica nueva que se instalaba, de las que se llegaron a tener 25. En otros casos se asociaron con industriales del ramo en distintas sociedades, reconvirtiendo las instalaciones de las fábricas ya existentes, con participaciones en torno al 50% (11 casos), y en otros casos, ejercieron la función de franquiciadores, dejando el uso de la marca y cediendo el "know how" a cambio del pago de un royalty (17 franquicias). En total llegaron a funcionar 53 fábricas para la elaboración y embotellado de las bebidas refrescantes de la marca. Al mismo tiempo, se aprovechó la infraestructura para fabricar y embotellar los productos de la marca Schweppes, dándose la particularidad de que la familia Duffo poseía el 100% de la filial en los primeros años de penetración de esta marca en el mercado español. Esta compleja estructura comenzó a modificarse en 1986, de forma que 12 sociedades de capital propio quedaron fusionadas bajo la denominación de La Casera S.A., y el resto desaparecieron.
No fue sin embargo un proceso rápido, si la gaseosa apareció en 50, cinco años más tarde eran tres las fábricas existentes de este producto, que llegaría a conocerse por todo el país en la década de los 60, teniendo su momento de mayor apogeo en la de los 80.
Al primer producto, la gaseosa, embotellada en envase de cristal de un litro con tapón mecánico, le acompañaron hacia 1967 La Casera Limón y La Casera Naranja. Dos décadas más tarde apareció La Casera Cola, primera cola sin cafeína de España, y se lanzó el formato no retornable. Para ello se creó una nueva sociedad, Casera Industrial, responsable de la fabricación de envases de plástico (PET), vidrio no retornable y latas, con factorías en Toledo y Córdoba. Por primera vez en España, una empresa fabricante y embotelladora de bebidas refrescantes integraba en su estructura la producción de las botellas. En los años 90, otros sabores como lima y manzana se añadieron al catálogo para desaparecer poco después. El Tinto de Verano La Casera (gran acierto embotellar la costumbre española de mezclar la gaseosa y el vino) y La Sangría de La Casera, fueron los últimos y exitosos productos de esta marca.
Fuente: Hemeroteca ABC 24/06/1967 |
Después de varios movimientos accionariales, La Casera está hoy en día integrada en el grupo Orangina-Schweppes, manteniendo una importante cuota de mercado que la hace ser líder absoluta en el sector de gaseosas.
Este hecho ha sido posible gracias a su especial publicidad. Patrocinios deportivos, promociones y especialmente eslóganes como "Pídala en todas partes", "Si no hay Casera nos vamos", "¿Te acuerdas cuando bebíamos agua?" y el toque de humor de sus spots, le han dado una gran cercanía al público.
Sin embargo, las primeras publicidades eran más serias, haciendo hincapié en la higiene de sus envases esterilizados, el automatismo en su producción y pureza de sus ingredientes, especialmente su agua tratada científicamente. Se habla en ellas de bidestilación y transparencia perfecta, y en numerosos anuncios aparecen fotos de sus instalaciones, garantía de su calidad.
Fuente: Hemeroteca ABC 24/04/1969 |
Fuente: Hemeroteca ABC 09/03/1962 |
Fuente: Hemeroteca ABC 19/03/1955 |
El logo ha permanecido prácticamente invariable en su larga vida, aunque la casita sonriente desapareció a comienzos de los 90 para ser recuperada en 2008. Desgraciadamente la botella clásica, que un principio tenía marcada en relieve su marca, desapareció hace tiempo, sustituida por una amplia variedad de formatos en envases no retornables, aunque en 1999 salió al mercado una edición conmemorativa serigrafiada de la que se fabricaron más de 1 millón de botellas.
(Hago desde aquí un llamamiento a que alguien corrija su artículo en la Wikipedia pues cuando apareció La Casera, el cierre de corcho con una cuerda que es citado como "tradicional", estaba superado hacía muchas décadas, de hecho el tapón mecánico era bastante común y no solamente patrimonio del agua oxigenada).
Fuentes:
Hemeroteca La Vanguardia
Hemeroteca ABC
www.lacasera.es
Wikipedia: artículo La Casera
No hay manera de encontrar ninguna foto, pero yo recuerdo perfectamente que de niñas mi madre nos mandaba a comprar Orante y era de la casera. Mi madre la llamaba orange por que era lo que ponía en la botella.
ResponderEliminarYo particularmente no tengo referencias de ese refresco, pero como has podido ver, la familia Duffo contaba con un amplio catálogo de bebidas, podría ser uno más.
Eliminar¡Buenas tardes! ¿Alguien sabe si hay recogido algo oficial escrito sobre las distintas fábricas de LA CASERA que había en España? ¿Y sobre sus estupendas colecciones de cromos?.
ResponderEliminarMuchas gracias, por la posible información que me podais hacer llegar...
¡Saludos desde Gijón!
ADOLFO (hasturiax@yahoo.es)
En este momento no puedo ayudarte con este tema concreto. ¿Por qué no te diriges a ellos? A veces estas empresas grandes editan libros sobre la historia de sus compañías y en ellos aparecen este tipo de datos. Por cierto que si hay algo, te rogaría que me lo comunicases. Sobre las colecciones de cromos, yo tenía alguno pero no hay manera de encontrarlo. Seguiremos en contacto, a ver qué averiguamos. Gracias por el comentario!!!
EliminarBuenos días! Felicidades por el excelente artículo. Me atrevo a hacer un apunte respecto a la marca de sifones mencionada: cuando yo entré a trabajar en La Casera en 1975 -"mi empresa" durante 47 años- se comercializaba sifones El Gallo. Tuvo fábrica en el centro de Madrid, en la calle del Cardenal Cisneros, muy llamativa por el rótulo de azulejos de la fachada en el que aparecía un gallo coloreado, aunque ya en esa época no estaba operativa y hubo que demolerla unos años después ante el riesgo de derrumbe.
ResponderEliminarhola, me dejas tu email ? quiero preguntarte sobre mi padre que también trabajo en esa época en La casera
EliminarMuchas gracias por esta interesante aportación, Paco. Saludos!!
ResponderEliminarHola Silvia!
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog y por el artículo.
Verás, veo que hay entrada en el blog de 2024, así que tengo fe en que me contestes.
En nuestra familia, siempre hemos tenido la historia jurada y perjurada, de que mi padre fue el autor del logotipo de La Casera (Imagotipo, creo recordar al contener la tipografía y la imagen).
Él era delineante y hacía trabajos de diseño gráfico. Mi madre sostiene que ganó un concurso sacado por La Casera y recibió un premio de 1000 pesetas, en mi casa guardamos un acetato original a mano hecho por él.
Mi duda es, cuánto me gustaría que esa historia fuera cierta pero no sé hasta qué punto darle credibilidad.
¿Cómo puedo empezar a buscar este tipo de documentación?
¿A dónde puedo acudir para ver estos registros o si, realmente, había una fábrica de La Casera en Burgos?
Te agradezco infinito de antemano tu ayuda.
Un saludo.
Qué pena no haber leído ésto antes. Mi abuelo fue el fundador de La Casera en Valencia. Mi padre y mi tío llevaron el negocio hasta que fallecieron. Seguro que lo sabían. Intentaré preguntar a algún primo a ver si saben cómo contactar con los Dufgo.
EliminarHola, primero gracias por tus palabras y, en segundo lugar, vamos a esa fantástica historia que tienes en la familia. En primer lugar, piensa que tu padre ganó un concurso y recibió una remuneración, por lo que (casi seguro) renunció a sus derechos sobre el logo, así que será difícil encontrar su nombre asociado en él. Si más o menos conoces la fecha en la que él pudo realizar el prototipo, lo que puedes hacer es buscar en la web de la Oficina de Patentes y Marcas (https://www.oepm.es/es/), verás la evolución de la marca (tipografía, etiquetas...) y podrás comprobar si la fecha en que tu padre pudo hacer ese logo y la fecha de registro coinciden (la imagen más antigua que he visto yo con su tipografía clásica es del 53). En cuanto a la fábrica en Burgos, seguro que no te será complicado consultar hemerotecas y encontrar pistas en periódicos antiguos, y también ir al Archivo Municipal y mirar, por ejemplo, programas de fiestas de la época. La Casera gastaba en publicidad, así que tuvo que dejar pistas. Y luego también, podrías recurrir al archivo de la misma empresa. Al haber cambiado de manos varias veces, no es fácil que se hayan conservado documentos del comienzo, pero nunca se sabe. En fin, ya nos iras contando.
ResponderEliminar¡Hola de nuevo!
EliminarMil gracias por tu contestación, Silvia. Voy a ponerme a ello e iré poniendo algún progreso si lo hay.
Enhorabuena otra vez por el blog.
Hola. Mira lo que encontré
Eliminarhttps://www.diariodeburgos.es/noticia/z2b1602d5-c822-6bd9-a20f7f06cff77694/202406/la-casera-burbujas-de-nostalgia-burgalesa